Llevamos dos días en Melilla y la verdad es que nos han cundido mucho. Hemos visto a muchos amigos, compañeros y conocidos, aunque la verdad es que eso resulta fácil, a fin de cuentas, estamos hablando de doce kilómetros cuadrados.
Nos ha dado tiempo de realizar muchas gestiones, incluso de ir al cine. Estuvimos viendo Iron Man. La película es entretenida, sin más.
Esta mañana he salido a andar, como de costumbre, aunque ha cambiado mi entorno, en lugar de estar rodeada de árboles y jardines, hoy he contemplado el mar, y la verdad era una delicia, hoy estaba como un espejo. He ido hasta la punta del dique Sur, frontera con el Puerto de Beni Ansar.
Como foto de la entrada he puesto una antigua del puerto de Melilla, con la Ciudadela al fondo. Actualmente está muy cambiado, tanto la dársena, como los edificios del Puerto que se ven a la derecha y que ya no existen.
Creo que Melilla es una de las ciudades que más han cambiado en los últimos diez años. Apenas hubo cambios en los cuarenta anteriores y en cambios en estos diez o doce últimos, han sido muchos. Para mejor, ya que estaba muy abandonada.
No he ido por mi antigua casa, creo que todavía siento nostalgia. Aunque mi actual casa tiene bonitas vistas al jardín, las de Melilla eran mejores. Daban al mar y tenías paisajes distintos cada hora. El mar nunca es el mismo, varía de continuo, por la luz, por el viento... Si, echo de menos el mar.
Nos ha dado tiempo de realizar muchas gestiones, incluso de ir al cine. Estuvimos viendo Iron Man. La película es entretenida, sin más.
Esta mañana he salido a andar, como de costumbre, aunque ha cambiado mi entorno, en lugar de estar rodeada de árboles y jardines, hoy he contemplado el mar, y la verdad era una delicia, hoy estaba como un espejo. He ido hasta la punta del dique Sur, frontera con el Puerto de Beni Ansar.
Como foto de la entrada he puesto una antigua del puerto de Melilla, con la Ciudadela al fondo. Actualmente está muy cambiado, tanto la dársena, como los edificios del Puerto que se ven a la derecha y que ya no existen.
Creo que Melilla es una de las ciudades que más han cambiado en los últimos diez años. Apenas hubo cambios en los cuarenta anteriores y en cambios en estos diez o doce últimos, han sido muchos. Para mejor, ya que estaba muy abandonada.
No he ido por mi antigua casa, creo que todavía siento nostalgia. Aunque mi actual casa tiene bonitas vistas al jardín, las de Melilla eran mejores. Daban al mar y tenías paisajes distintos cada hora. El mar nunca es el mismo, varía de continuo, por la luz, por el viento... Si, echo de menos el mar.