lunes, 8 de febrero de 2010

Enrique Cornelio Agrippa de Nettesheim

Enrique Cornelio Agripa de Nettersheim, ejerció muchos oficios durante su vida, pero se le puede considerar como la figura más importante del ocultismo durante el Renacimiento. Nacido en Colonía, de familia noble, recibió una buena educación universitaria y con 20 años, ya poseía amplios conocimientos de mágia, cábala y alquimia.
En su obra principal "Los tres libros de la Filosofia oculta", recogió todo el conocimiento medieval sobre magia, astrologia, alquimia, medicina y filosofia natural, siguiendo según dicen los consejos de su mentor el mago Trithemius, y aunque parezca mentira, esa búsqueda de las formas ocultas de la naturaleza, que no se ajustaba a la doctrina cristiana, se la puede considerar punto de partida de la ciencia moderna.

Estuvo en las más conocidas universidades de su tiempo, como estudiante y como profesor y fue amigo de la mayoria de los filosofos y grandes de su época, estuvo por ejemplo al servicio de Maximiliano I, de Carlos V y del Papa Clemente VII.

El haberse dedicado al estudio de las ciencias ocultas, le obligó a vivir en constante éxodo, ya que fue peseguido en varios paises, y durante su peregrinaje por Europa trabajó como:

  • teologo,
  • físico (trabajo enseñando medicina, hebreo y filosofia en varias universidades europeas, y tenía también gran reputación como médico en ejercicio),
  • abogado (tuvo varios enfrentamientos con la Inquisición, al defender a varios acusados de hechiceria),
  • soldado (como soldado al servicio de Maximiliano I estuvo en Cataluña, donde un levantamiento de payeses, casi le costó la vida)...
Aunque más tarde abandonaria todas sus teorias, afirmando la vanidad de todo saber y la validez de la Biblia.
Pero son dos los motivos de que Agripa tenga esta entrada.
Uno porque se le puede considerar como uno de los primeros feministas. En su obra "De la nobleza y excelencia del sexo femenino", aboga por la igualdad de las mujeres, y eso merece un reconocimiento.
Y el segundo motivo, son sus cuadrados mágicos. Involucró los siete planetas conocidos con siete cuadrados mágicos, de ordenes 3 a 9, atribuyendoles un significado astronómico.
Veamos cada uno de sus cuadrados:
  • Cuadrado Mágico de Saturno. Es de orden 3 y utiliza los números de 1 al 9, siendo la constante mágica el 15. Los colores que le aplica son el blanco para los números y el negro para el fondo. El metal asociado es el plomo y lo vincula a la muerte y el fin.
  • Cuadrado Mágico de Júpiter. Es de orden 4 y utiliza los números del 1 al 16, siendo la constante mágica el 34. Los colores que le aplica son el amarillo para los números y el azul para el fondo. El metal asociado es el estaño y lo vincula al cielo.
  • Cuadrado Mágico de Marte. Es de orden 5 y utiliza los números del 1 al 25, la constante mágica es el 65. Los colores que le aplica son el verde para los números y el rojo para el fondo. El metal asociado es, el hierro.
  • Cuadrado Mágico del Sol. Es de orden 6 y utiliza los números del 1 al 36, su constante mágica es 111. La suma del número de todos sus cuadrados es 666, el número de la bestia en el Apocalipsis. Los colores son violeta o magenta para los números y amarillo para el fondo. Su metal, lógicamente, el oro.
  • Cuadrado Mágico de Venus. Es de orden 7 y utiliza los números del 1 al 49, su constante mágica es 175. Los colores, amarillo limón para los números y verde oscuro para el fondo. Su metal, el bronce.
  • Cuadrado Mágico de Mercurio. Es de orden 8 y utiliza los números del 1 al 64, su constante mágica es 260. Los colores azul claro para los números y naranja para el fondo. Su metal, claro, el mercurio.
  • Y por último el Cuadrado Mágico de la Luna. Es de orden 9, utiliza los números del 1 al 81, su constante mágica es 369. Utiliza los colores contrarios a los del sol, es decir amarillo para los números y morado o magenta para el fondo. Su metal, por supuesto, la plata.