jueves, 29 de octubre de 2009

El Cabo de Palos, Las Islas Hormigas y el naufragio del Sirio

Estos días hemos estado en La Manga del Mar Menor, a diez minutos andando del Cabo de Palos. Orográficamente el Cabo forma parte, junto a las Islas Hormigas, de las últimas estribaciones de la Cordillera Penibética.
El origen del nombre, en realidad se lo da al cabo, la cercania del Mar Menor, ya que
palus, es laguna en latín.
Sobre el promontorio del Cabo, donde actualmente se encuentra el faro, hubo antiguamente un templo consagrado a Baal Hammón, principal dios fenicio, adorado en la antigua Cartago, que los griegos identificaban con Cronos y los romanos con Saturno.

Posteriormente y para defender la zona de los ataques berberiscos, Carlos I ordena construir una torre de vigia, que se bautizaria con el nombre de Torre de San Antonio. Con Felipe II, se emprende un sistema completo de defensa de las costas españolas, terminándose la torre, de estilo renancentista, que tenía forma hexagonal.

A pesar de que a mediados del siglo XIX, la torre se hallaba en muy buen estado de conservación, es demolida y sus sillares son utilizados en la construcción del actual faro. Se
trata éste de un edificio de estilo neoclásico, construido originariamente como escuela de torreros, y que se iluminó por primera vez el 31 de enero de 1865, balizando actualmente la zona junto con el faro de Isla de Hormiga.
Antes de terminarse el faro, y debido a la peligrosidad de la zona por sus bajos fondos, se construyó el más pequeño, como comentaba, justo en la isla de Hormiga Grande, que fue destruido por un viento de levante la noche del 1 de noviembre de 1869, arrancando los cuatros muros del edificio y destruyendo parte de la torre, muriendo la mujer del farero, tres de sus cuatro hijos y el ayudante. Posteriormente se elaboraria un nuevo proyecto de planta circular, que es el que se encuentra ahora.

Pero son muchas las desgracias ocurridas en esta zona. Algunos de los naufragios de Las Hormigas han sido los siguientes:
  • en 1883 se hundió el North America
  • en 1899 el Minerva
  • En 1916 el vapor italiano Primo
  • 1917 fue un año siniestro, ya que se hundieron: el vapor noruego Gisa, el italiano Lillia Dubild, el griego Despina Micalina y el mismo día y en el mismo lugar que el griego el italiano Doris y también un mismo día se hundieron el vapor inglés Urd y el vapor norteamericano Atlantic City
  • 1918, no fue mucho mejor, se hundió el vapor americano Wilmore, también un vapor francés de nombre desconocido. Y el vapor griego Nitza, no se si se hundió en 1917 o en 1918.
  • El Carbonera, también se hundió allí durante la Primera Guerra Mundial.
  • El Monte Toro, un vapor español se hunde en 1937
  • En 1940 se hunde el vapor inglés Kansega.
  • En 1950 el Isla Gomera, conocido como Naranjito por su carga de naranjas.
  • En 1999 la Marina Española hunde la embarcación de minas de madera de nombre Turia.
Pero sin lugar a dudas el naufragio más conocido fue el del "Sirio", un trasatlántico italiano que se hundió en 1906, con gran cantidad de víctimas mortales.
El barco realizaba la ruta entre Italia y el Cono Sur, llevando gran cantidad de emigrantes.
El buque zarpó de Génova el 2 de Agosto de 1906, con destino a Brasil, Uruguay y Argentina, pasando por las costas de Cartagena, el 4 de Agosto.
Como comentaba al principio, el promontorio del Cabo se sumerge en el agua, volviendo a surgir en las Islas Hormigas, dejando esta franja con zonas de una profundidad muy escasa, algunas de solo tres o cuatro metros, denominadas "bajos". Todas las rutas marítimas de la época bordeaban las islas, para evitar el peligro de estos bajos. La zona estaba marcada en las cartas y el faro avisaba del peligro de esta costa, por lo que no se entiende que el Capitán decidiera dirigir la ruta del barco entre el cabo y las islas.
A las cuatro de la tarde, el barco sufrió un fuerte impacto chocando con el "bajo de fuera", quedando varado sobre el mismo. Como consecuencia de la colisión, explosionaron las calderas del barco, causando una gran mortandad entre los trabajadores de máquinas. El capitán y los oficiales, fueron los primeros en subir a un bote salvavidas abandonando a pasajeros y tripulación a su suerte.
Fueron los pescadores del puerto de Cabo de Palos, quienes organizaron las tareas de salvamento, consiguiendo salvar a numerosas personas.
No se sabe con exactitud el número de muertos ni de supervivientes, por varias razones. Era costumbre de la época que el capitán y la tripulación, admitiera pasajeros de forma extraoficial, que pagaban una cantidad considerablemente inferior al pasaje establecido. Lógicamente estas personas no figuraban en ninguna parte. Además era también costumbre contar como uno a cada cuatro niños... pero se estima que fueron salvados alrededor de 580 personas y unas 240 las fallecidas.
Los restos del Sirio descansan a gran profundidad en la zona, a unos 40 metros se encuentra la popa y unos 70 la proa.
Desde 1995, que se declaró la zona como Reserva Marina de Cabo de Palos e Islas Hormigas, el buceo está restringido y se necesita permiso para visitarlo, intentando preservar así la flora y fauna de la zona.